En busca
de la verdad

Cómo crear una comisión de la verdad eficaz

Este multimedia está basado en la publicación En busca de la verdad: Elementos para la creación de una comisión de la verdad eficaz.

Las víctimas tienen derecho
a saber la verdad

Después de épocas de conflicto o represión, las sociedades suelen enfrentarse a la dura realidad de seguir sin conocer el paradero de muchas víctimas y de que las circunstancias de su desaparición y sufrimiento sólo las conozcan los autores de esos crímenes, rara vez dispuestos a revelar la verdad. En esas sociedades, las iniciativas de búsqueda de la verdad pueden ser determinantes para documentar y reconocer las violaciones de derechos humanos y para proclamar el derecho de las víctimas y sus familiares a saber la verdad.

Los que buscan la verdad sobre abusos generalizados o atrocidades masivas se enfrentan a ciertos desafíos. Los regímenes represivos reescriben deliberadamente la historia y niegan las atrocidades para legitimarse y evitar asumir la responsabilidad penal que conlleva cometer crímenes graves.

En países como Argentina y Chile, las dictaduras militares intentaron silenciar y controlar a la oposición política con prácticas criminales envueltas en el secreto. La gente era secuestrada en plena calle, arrancada de su cama de madrugada o capturada durante una concurrida manifestación. En muchos casos no se volvió a saber de ellos.

La legislación internacional reconoce claramente el derecho de las víctimas y los sobrevivientes a saber la verdad sobre las circunstancias en que se cometieron violaciones de derechos humanos graves y quiénes fueron los responsables.

¿Por qué importa la verdad?

Establecer la verdad sobre crímenes graves puede ayudar a las comunidades a comprender las causas de los abusos y a ponerles fin. Sin un conocimiento preciso de las violaciones de derechos sufridas es difícil impedir que ocurran de nuevo.

La verdad puede contribuir al proceso de recuperación luego de acontecimientos traumáticos. También puede restablecer la dignidad personal, frecuencia menudo después de años de estigmatización, y evitar la impunidad de los verdugos o la negación por parte del Gobierno o del conjunto de la sociedad. Todas las culturas reconocen la importancia que tiene el duelo para la recuperación personal y comunitaria cuando se sufre una pérdida.

El Derecho a la Verdad

Las víctimas de violaciones flagrantes de los derechos humanos y sus familiares tienen derecho a saber la verdad sobre los abusos que han sufrido.

Las Naciones Unidas reconocen el derecho a la verdad en la Declaración sobre la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas (1992), los Principios y directrices básicas sobre el derecho a interponer recursos y obtener reparaciones (2005) y la Convención internacional para la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas (2006).

Para conocer la verdad
"hasta donde sea posible"
es preciso averiguar:

  • La identidad de los perpetradores
  • Las causas que condujeron a los abusos
  • Las circunstancias y hechos de la violación de derechos
  • El destino último y el paradero de las víctimas de desaparición forzada
Más información sobre el Derecho a la Verdad. Capítulo 1

¿Cómo establece la verdad
la justicia transicional?

La búsqueda de la verdad contribuye a la elaboración de un relato histórico contrastado que impida la manipulación de los hechos y la información. Puede ayudar a las víctimas a cerrar heridas, permitiéndoles saber más sobre los acontecimientos traumáticos que han sufrido y descubrir la suerte de sus seres queridos desaparecidos o el motivo de que ciertas personas o grupos fueran objetivo de abusos.

Las iniciativas de búsqueda de la verdad son muy diversas (leyes que garantizan la libertad de información o la desclasificación de archivos, investigaciones sobre personas desaparecidas). Es cada día más frecuente la constitución de comisiones de investigación no judiciales, entre ellas las comisiones de la verdad.

¿Qué es una comisión
de la verdad?

Las comisiones de la verdad son iniciativas de investigación temporales y oficiales, puestas en marcha para esclarecer los hechos, las causas y las consecuencias de violaciones de derechos humanos pasadas. Al otorgar una especial atención a los testimonios, proporcionan reconocimiento a las víctimas, con frecuencia después de muchos años de ver sus voces silenciadas o ignoradas.

Objetivos de
una comisión de la verdad:

  • Esclarecer cómo se produjeron acontecimientos violentos controvertidos o negados
  • Proteger, reconocer y dar poder a las víctimas y los supervivientes
  • Aconsejar políticas, fomentar el cambio en asociaciones e instituciones y contribuir a la transformación socio-política.

Las comisiones de la verdad pueden:

  • Aportar a los procesos judiciales y las reparaciones con sus hallazgos y recomendaciones
  • Ayudar a sociedades divididas a superar una cultura de silencio y desconfianza
  • Ayudar a identificar qué reformas institucionales se precisan para evitar nuevas violaciones de derechos

Reconciliación:
Un concepto polémico

Muchas comisiones de la verdad buscan fomentar la reconciliación nacional y muchas incorporan la propia palabra "reconciliación" a su nombre oficial y su mandato. Sin embargo, las comisiones han interpretado de maneras diversas ese objetivo. Algunas han intentado restablecer la relación entre los perpetradores y sus comunidades; otras han contribuido a la reforma del Estado y las instituciones para recuperar la confianza ciudadana; y otras se han centrado en las causas del conflicto, proporcionando compensaciones y ofreciendo justicia a las víctimas.

La reconciliación debe entenderse como un proceso social de largo recorrido que no puede plasmar por sí sola una comisión de la verdad ni materializarse en un periodo limitado. Como máximo, una comisión de la verdad puede ayudar a crear condiciones que favorezcan la reconciliación fomentando la reforma institucional, cambios en la cultura política de un Estado o la recuperación de la dignidad de los afectados por la violencia.

Más información sobre las comisiones de la verdad. Capítulo 2

Legitimidad
e independencia

Para el trabajo de una comisión es esencial que se la considere legítima. La confianza pública mejora la disposición de las víctimas y las comunidades a participar en actividades de búsqueda de la verdad y a compartir información valiosa. Si una comisión es percibida como legítima, eso puede protegerla de adversarios empeñados en guardar silencio sobre abusos o en negarlos.

En condiciones ideales, los términos para la creación de una comisión se definen mediante un proceso consultivo, con debates abiertos entre el Gobierno, la sociedad civil, las asociaciones de víctimas y otras partes quizá afectadas por el trabajo de ese organismo.

Condiciones que garantizan la independencia de una comisión:

  • Un proceso de nombramiento de comisionados transparente
  • Garantías jurídicas de que sólo podrán ser destituidos por razones justas
  • Protección de esos comisionados frente a posibles amenazas o represalias
  • Autonomía económica, administrativa y operativa
Más información sobre la importancia de que una comisión de la verdad sea considerada legítima e independiente. Capítulo 3

Cometidos que suelen tener las comisiones de la verdad:

  • Redactar un informe que determine de manera precisa e imparcial la verdad histórica sobre las violaciones de derechos humanos
  • Recoger información y testimonios
  • Proteger la integridad y bienestar de las víctimas
  • Realizar programas de divulgación pública
  • Proponer políticas que garanticen la no repetición de las violaciones de derechos
  • Apoyar la labor del sistema judicial
  • Fomentar la reconciliación comunitaria o nacional
El mandato legal crea el marco para una comisión de la verdad eficaz. Más información: Capítulo 4

Un momento clave:
La constitución
de la comisión de la verdad

Cobrando impulso - Cómo empezar a concienciar a la población

Antes de que una comisión inicie sus trabajos, puede utilizarse todo un abanico de medios para informar al público del proceso y de su importancia, y para ayudar a impulsarlo. Se pueden distribuir materiales impresos en actos de divulgación, a través de redes ciudadanas y mediante contactos locales. Pero también se puede recurrir a la radio, la televisión y la prensa, y a canciones, teatro y carteles. Los miembros de la comisión también deben visitar las regiones afectadas por la violencia, incluyendo las más lejanas, para dar a conocer ese organismo y consultar a colaboradores importantes sobre cuestiones de verdad, rendición de cuentas y reconciliación.

En ocasiones, reuniones como las realizadas en ayuntamientos proporcionan un foro para que los miembros de la comisión y su personal expliquen sus actividades a las comunidades y respondan a sus preguntas. Se pueden celebrar reuniones consultivas y capacitaciones con víctimas, excombatientes, policías, militares, parlamentarios, líderes religiosos, profesores, mujeres, niños, jóvenes y otros sectores.

Hay que indagar en las costumbres locales

Desde el principio, la comisión debe saber cómo los diversos grupos afectados por la violencia han acostumbrado a encarar las violaciones de derechos más graves, el castigo, la rendición de cuentas y la reconciliación, e informarse de otras cuestiones importantes como la utilización cultural del ritual, la narración oral y otras costumbres. Esta exploración debe realizarse involucrando a las comunidades locales y asegurándose de que se respeta el derecho de grupos como los indígenas a ser auténticamente consultados sobre cuestiones que les afecten.

Más información sobre los primeros pasos en la formación de una comisión de la verdad. Capítulo 5

De la constitución
al funcionamiento regular

La toma de declaraciones

La recogida de declaraciones es la actividad fundamental de las comisiones de la verdad, ya que es la principal manera de relacionarse con las víctimas y los testigos. Un deponente, es decir, quien presta declaración bajo juramento, debe poder relatar su historia de forma que, cultural y psicológicamente, tenga sentido para él o ella y respete sus propias técnicas narrativas.

Audiencias públicas

Las audiencias públicas permiten a las víctimas compartir sus experiencias con un público nacional y con los medios de comunicación. En ocasiones se utilizan como método para difundir testimonios de determinados expertos e importantes personajes políticos.

Algunas comisiones están facultadas para permitir la participación de los perpetradores en las sesiones, aunque esta práctica no está exenta de polémica. Hay quienes señalan que traumatiza aún más a las víctimas o que algunos testigos pueden aprovechar esa oportunidad para engrandecer su perfil político.

Más información sobre las tareas cotidianas de una comisión de la verdad. Capítulo 6

Estructura organizativa

En gran medida, el éxito de una comisión de la verdad depende de su capacidad para organizar sus múltiples tareas, distribuir cometidos, fijar prioridades y fomentar la cooperación entre sus comisionados y trabajadores.

La estructura organizativa de una comisión debe enfrentar diversos retos:

  • Canalizar los flujos de información interna y distinguir entre las funciones de sus comisionados y las de sus empleados
  • Desplegarse territorialmente, lo cual le permitirá llegar mejor a víctimas y testigos
  • Utilizar equipos especializados internos, identificando puntos fuertes, sinergias y posibles formas de cooperación
  • Gestionar los recursos de manera adecuada y eficaz
Más información sobre la estructura organizativa de una comisión de la verdad. Capítulo 7

Tareas de divulgación

Para ser eficaces, las comisiones de la verdad deben llegar a víctimas, testigos y otros participantes directamente involucrados en el proceso de búsqueda de la verdad, así como al conjunto de la sociedad. Para que una comisión alcance sus objetivos, la colaboración social es clave.

Para darse a conocer, una comisión de la verdad puede definir objetivos divulgativos como los siguientes:

  • Compartir información
  • Suscitar el diálogo
  • Consultar a diversos grupos
  • Apoyar la participación de las víctimas y de la sociedad

Cómo involucrar a la sociedad civil

Las organizaciones no gubernamentales y comunitarias pueden ser colaboradoras de peso en el proceso de búsqueda de la verdad, ya que cuentan con varias ventajas que pueden compartir con una comisión de la verdad, entre ellas el acceso a la información, la experiencia en pesquisas y la capacidad de identificar casos y situaciones clave que hay que investigar.

La diversidad en las
comisiones de la verdad

Una investigación genérica que no recoja las diversas experiencias de una población no podrá revelar ni comprender del todo los abusos y violaciones de derechos que se hayan producido. Tampoco podrá reconocer adecuadamente a las víctimas ni recomendar políticas que eviten la repetición de los abusos.

En los últimos años las comisiones de la verdad han hecho avances significativos en la integración de la perspectiva propia de las mujeres, con frecuencia afectadas de manera especial por los conflictos y la violencia. También están esforzándose para que su trabajo sea sensible a las necesidades de los niños y recoja los derechos y tradiciones culturales de los pueblos indígenas. Un enfoque incluyente debe incorporar a esos grupos vulnerables, a menudo marginados de importantes debates que les afectan directamente.

Para comprender en toda su extensión los abusos investigados, recabar un apoyo amplio para la comisión y crear las condiciones adecuadas para materializar sus recomendaciones finales es esencial partir de un enfoque incluyente.

El informe final

Las labores de una comisión de la verdad suelen culminar con la publicación de un informe final, que deja constancia oficialmente y por escrito de su trabajo y sus hallazgos. En años posteriores, ese documento debería ser una importante obra de referencia para estudiosos, responsables políticos e historiadores.

El grueso del informe final lo constituyen los hallazgos de la comisión, sus conclusiones y descripciones de acontecimientos históricos. Otro importante elemento son sus recomendaciones para desarrollar políticas públicas.

El trabajo no termina con el informe final...

La presentación del informe final no debería suponer el fin de las tareas de la comisión, cuyo mandato legal suele determinar qué grupo o departamento tiene que compartir ese texto con la sociedad y otras partes interesadas. También debe indicar qué grupo ha de hacerse cargo de las decenas de miles de páginas de documentación reunida por la comisión. Es frecuente que su conservación recaiga en una nueva institución, generalmente un cargo de nuevo cuño que sigue el modelo de la propia comisión, o una institución ya existente, como un archivo histórico o un centro académico, con capacidad para cumplir ese cometido.

La redacción de un informe final no acaba con el proceso de búsqueda de la verdad.

Más información sobre qué se necesita para garantizar que una comisión contribuya a un auténtico cambio social: Capítulo 10
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